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Arquitectos: OHLAB
- Área: 2500 m²
- Año: 2019
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Fotografías:José Hevia
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Proveedores: Dornbracht, Agape, AutoDesk, Fontini, Inbani
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Can Bordoy -Grand House & Garden- es un pequeño hotel de 24 habitaciones con un magnífico jardín con piscina, spa y terraza panorámica, situado en el centro histórico de Palma de Mallorca. Se trata de una reforma integral de una edificación abandonada de 2500 m2 que ha sido muy intervenida a lo largo de sus más de 500 años de historia. Uno de los elementos más característicos de la propiedad es su jardín, no sólo por su tamaño, sino por la riqueza y antigüedad de la vegetación existente. Una de las actuaciones más importantes del proyecto ha sido abrir las puertas del jardín, hasta ahora desconocido por la mayoría, a la ciudad y darle visibilidad desde el patio de entrada y la calle de acceso.
El programa propuesto es más propio de una casa que de un hotel. Así, más que la recepción de un hotel el cliente se encuentra con el recibidor de una casa, en lugar del restaurante encontramos un comedor residencial, las habitaciones y salones son las propias de una casa antigua, etc. El proyecto mantiene cuidadosamente el ambiente romántico y decadente encontrado en el edificio y contrasta con las intervenciones y elementos de diferentes épocas. Es una intervención respetuosa con ese mestizaje arquitectónico, que ha procurado mantener las trazas del pasado y evitar una falsa recuperación de un pasado glorioso que la casa nunca tuvo.
Inspirado en la técnica tradicional japonesa de Kintsugi -consistente en el arte de reparar porcelana milenaria rota con un material precioso, como polvo de oro, y obtener así una pieza reparada que no esconde la fractura, sino que la muestra y la celebra y cuyo resultado es una pieza que puede tener incluso más valor que la cerámica antes de romperse- se ha buscado un proyecto que no pretende esconder el heterodoxo eclecticismo de la edificación existente, sino celebrar las diferentes capas de historia y remarcar las nuevas intervenciones que han sido necesarias para dar un nuevo uso a la casa.
Una serie de estrategias arquitectónicas fueron diseñadas y desarrolladas por todo el edificio como una colección de intervenciones teatrales y contemporáneas que dialogan con el edificio existente. Grandes cortinas de terciopelo camuflan los nuevos baños de las habitaciones creando un juego escenográfico donde el baño pasa a ser escenario de la habitación y donde en lugar de esconderse, se celebra su uso como elemento nuevo. En la planta baja, un corredor verde de vegetación invade los comedores conectando el jardín con el patio de entrada y con la calle.
En el patio de la escalera, el lucernario cenital se inunda de agua convirtiéndose en una pequeña piscina con el fondo transparente creando reflejos de luz cáusticos. El mobiliario es una parte muy importante del proyecto. El eclecticismo de la arquitectura se refleja en la selección de mobiliario con piezas de muy diferentes épocas y orígenes. Piezas antiguas conviven con muebles contemporáneos cuidadosamente seleccionados y con mobiliario diseñado por OHLAB específicamente para Can Bordoy como una colección de camas y minibares.